El Tiempo: Aprende a valorarlo

Aunque tengo entradas atrasadas por terminar de escribir y entradas futuras que empezar, hoy quiero hablar sobre el valor que tiene el "tiempo", una de mis obsesiones en las carreras. Este fin de semana se celebró la segunda edición de la Ultra Trail Sierra Segura, carrera de 103 kilómetros donde tuve la suerte de participar y poder volver a ponerme un dorsal para competir. Cuando sales a darlo todo en una carrera de ultra distancia, te conviertes en una mezcla de movimiento, emoción y pensamientos. Pocas veces se movilizan tantos recursos y energía como cuando nos proponemos sumar kilómetros y kilómetros para alcanzar nuestro objetivo, que no es otro que llegar a meta en el menor tiempo posible. Y es que competir en las carreras de larga distancia son como pequeñas vidas que se nos ha dado comprimidas para vivirlas al máximo, esto implica, estar siempre en movimiento, adaptándonos a cambios, superando obstáculos, promoviendo logros, dando forma a una realidad que se va ajustando a nuestras posibilidades conforme el tiempo avanza. Y es el tiempo, en competición o en la vida, un denominador común. En la vida nos va forjando y moldeando según lo qué vivimos, nos da la razón en algunas cosas, pero en otras nos la quita y cada persona debe de intentar gestionarlo para poder darle sentido a su vida y no dejar que otros lo hagan.

En las carreras de larga distancia, es donde yo he aprendido a valorar realmente el tiempo, en todo su ámbito, por muy corto o largo que este sea. Si nos fijamos en los meses previos a una carrera, en ellos trazamos pequeñas y grandes metas que nos obligan a dar lo mejor de nosotros mismos. Y esto, como todo el mundo debe de saber, requiere de mucho tiempo, con todos los sacrificios que ello conlleva, algo que muchos no están dispuesto a hacer ni a entender. Si nos centramos en el día de la carrera, el gran día, desde que se da la salida, cada minuto transcurrido en la competición requiere de nuestra atención, acción, no se puede parar, tampoco nosotros. Si le has dedicado el suficiente los meses previos, quizás puedas aprovecharlo mejor, pero nunca tener más. Con este concepto del tiempo, definimos su valor e importancia cuando competimos, y es que podemos recorrer decenas de kilómetros persiguiendo o perseguido por otro corredor, a tan sólo unos pocos minutos de él y nunca llegar a alcanzarlo. Hablamos de horas corriendo, kilómetros, cada uno a su ritmo, sin cruzar palabras, sólo esfuerzos, pero cada uno dándole al tiempo el valor que se merece, aprovecharlo, para recorrer la mayor distancia posible. Porque en eso consiste una competición, en devorar rápidamente los kilómetros mientras pasa el tiempo o por lo menos así es como yo lo veo.

Y es así como me di cuenta de que el tiempo es el mismo para todos. Si el tiempo es lo más importante, te deberías preguntar si verdaderamente aprovechas cada minuto que estás en carrera y si es así, te aseguro que obtendrás buenos resultados o por lo menos, mejores de los que esperabas. Todos aquellos minutos que no los exprimas los perderás para siempre y no los podrás recuperar. Hagas lo que hagas, emplees el tiempo en lo que lo emplees, debes de tener en cuenta que ese momento es único y no volverá, por lo tanto siempre será recomendable el saber en que lo "gastas" porque hay cosas que puedes recuperar en esta vida pero "el tiempo" no es una de ellas. Quedarse con la sensación de que cuando haces algo has perdido el tiempo es algo muy negativo para nuestra alma. Solamente el hecho de intentarlo ya significa que no has perdido el tiempo aunque el resultado no sea tan positivo como se esperaba. Que nadie te robe tu tiempo porque hasta un simple minuto, puede ser determinante en tu vida. En próxima entrada hablaré de la carrera en sí, de la previa, del recorrido y el resultado, ya que este tipo de eventos engloban todo el fin de semana al completo.